Tomar a mamá y papá nos impulsa a la vida, nos da fuerza y nos abre las puertas al éxito y la abundancia. El bloqueo está en el pasado. Recordemos que en la infancia damos a nuestros hijos la energía de vida para desarrollarse en su vida de adulto, y si no la damos sabiamente, enfermamos, bloqueamos ese influjo. Todos los talleres incluyen ejercicios de Constelaciones Familiares
Abrazar incondicionalmente a nuestra madre nos permite el éxito, la salud, el amor y la abundancia fluyan en nuestra vida. Ese es el vínculo más importante, porque es el primero que mantenemos en nuestra vida. De ella nos nutrimos, y conforme haya sido esa nutrición, serán las herramientas que tendremos para enfrentar la vida.
Abrazar a nuestro padre nos da la capacidad de adaptación, la realización profesional y el sentido de responsabilidad fluya en nuestra vida. Permite concretar proyectos, independizarte y avanzar hacia la madurez.
La idea es que el niño que está herido aprenda a confiar en el adulto presente ahora. El ser consciente que volver a ignorarle sería hacerle sentir de nuevo abandonado. Ahora es tiempo de abrazarlo, amarlo y desde tomar nuestro estado adulto, permitirnos ir hacia la vida.
De la madre se desprende la relación que mantenemos con nuestro cuerpo, la relación que mantenemos con el mundo, la relación que mantenemos con la comida, la relación que mantenemos en otras relaciones.
Si yo no recibí un maternaje apropiado, óptimo, donde todas mis necesidades emocionales, afectivas estuvieran cubiertas, me costará maternar a mis hijos, ya que no recibí energía de vida de mi madre, mi madre tampoco tuvo energía de vida para maternarme como debío hacerlo.
Muchas madres, siguen esperando el amor que no recibieron de su madre, no logrando cortar el cordón sanamente, cuando hacemos esto, estamos desprotegiendo a nuestros hijos. Debemos sanar este aspecto. Mientras yo esperé amor de mi mamá siendo una adulta con hijos, debo saber que no estoy nutriendo a mis hijos, quedándome en un estadio infantil. Creando una cadena de desnutridos emocionales.
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Aquello que te gusta y aquello que no te gusta de papá, también está en ti.
Tomar al padre es asentir tal y como es, con sus luces y sus sombras.
Con ello consigues la paz y puedes cambiar lo que no te gusta de ti. Tomar a tu padre te permite hacer tu vida de la mejor manera, tomando tu responsabilidad y hacer por ti lo que hasta ahora le has exigido a él.
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Es maravilloso el giro que dará tu vida, una vez reconciliada con tu niña interna. Y la fuerza que ganas, porque sabes usar todo el potencial que tiene ese niña (creatividad, curiosidad, riesgo, ternura, confianza, etc).
La idea es que a ese niña, se le reconozca y se le escuche. Que pierda el miedo y deje de estar paralizada o escondiéndose detrás de máscaras con apariencia de dureza.
La idea es ser consciente del dolor y reconciliar a ese niño interno con el adulto actual. A continuación te expongo diferentes maneras de abordar el tema de sanar al niño interno.
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Después de llevar a cabo talleres y sesiones, veo en un porcentaje elevado la dificultad de superar episodios de la infancia tanto referentes a mamá y papá, como un niño interior dolido y herido
Las fuerzas invisibles que se transmiten tanto por ambos padres, como el desarrollo de un ¨yo¨ sano son indispensables para vivir una vida con fuerza, con ilusión desde un equilibrio sano que se irradia y se transmite de generación en generación. Todos los talleres incluyen ejercicios de Constelaciones Familiares.
Estudié Psicoterapia, Life Coaching, Terapeuta emocional. Atraída por la sabiduría, guarda la espiritualidad. Integro mis conocimientos para que logres encontrar en tu vida de manera eficaz y práctica, liberarte del estrés y la ansiedad, mejorar la relación contigo misma, sanar la relación con tu círculo familiar y personal, encontrando la sabiduría que habita en ti.